miércoles, 29 de abril de 2009

Un acuerdo


Soy rigurosamente fiel a mis oscilaciones mentales en consecuencia, mi ubicuidad no debe de tenerse como una hazaña histórica.

Es comprensible que un día desde mi cuarto de un salto repentino y brusco a través del vació de la ventana y al mismo tiempo estar colgada de una hebra de mis cabellos, mientras el oxigeno se me escapa.

Quizás al pie de mi cama nadando en un charco de Sangre con delfines vino tinto.

El cajón! Que se prohíbe abrir, sacar el arma, que mientras estuvo guardada era feliz, pararme frente al espejo y tener satisfactoria puntería minuciosamente acariciar el gatillo

Embriagarme, ingerir inhalar los mejores venenos mortales

Inhalar: Ántrax, Sarin, mercurio y Cianuro
Ingererir: Tetrodotoxina, Anatoxina, Toxina botulínica y Cianuro


Compadecerme de Juana de Arco! e iluminar la habitación con fuego ser asi una antorcha ambulantes

.
Todo esto sin necesidad de desprenderme de mi íntimo y silente cuarto.
Siendo este único testigo, cuatro paredes equilibradas con otro sueño nefasto…

En este tiempo nadie sabe Vivir
Nadie quiere morir.

Prefiero aliarme con la indescifrable Muerte, mientras aprendo de la Vida.



De: Lia Varney

2 comentarios:

Danthé dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Danthé dijo...

Disculpa si he borrado mi anterior comentario, lo he escrito mal.

COmo decia, me agradan las ideas expresadas en esta entrada, sin embargo, el orden no me place lo suficiente.